El viaje continua ; luego de nuestro grato
encuentro con Pekín tomamos un tren local dirección al sud oeste ; destino Xian,
en donde un ejército inmóvil nos espera rígida y despreocupadamente desde hace
22 siglos , son los guerreros de terracota de Xian , miles de estatuas de talla
natural hechos en barro ; los cuales fueron descubiertos en el año 74 por un
campesino que extraía agua de un pozo, realmente pese a su inofensiva presencia
uno se siente curiosamente vigilado y hasta cierto punto inspiran un respeto
marcial . hoy por hoy la cuidad de xian es una urbe china más inundada de
carros y un « Progreso « urbano que por esta vez ha hecho las paces con la
cuidad antigua la cual pese a todo se protege con una muralla al mejor estilo
chino. La cual le permite guardar cierto sabor a autentico .
Luego de esta cita a 3 horas de bus
llegamos a Luoyang ; la cual oculta en sus montañas y ríos más precisamente en
Longmen una magnifica colección de cavernas y esculturas de Buda en todas sus
variantes y posiciones ; un lugar realmente maravilloso donde pese a la
cantidad de turistas nacionales uno llega a recibir de sus piedras y templos un
sentimiento de calma ; admiración y felicidad de hacer al menos por unas horas
parte de este paisaje ; lamentablemente una gran parte de las esculturas se
encuentran acéfalos ; debido a la guillotina ideológica a la cual fueron
sometidos durante la revolución cultural de Mao ; no por eso felizmente han
dejado de transmitir su milenaria sabiduría y su reposada mirada al futuro.
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