Abran Paso

Ya las piernas se han acostumbrado a las montañas , los pulmones ya han reconocido el aire carente de monoxido de carbono, y los ojos no se acostumbraran nunca a ver tanto verdor alrededor, siempre enmarcados entre las montañas nevadas de los Himalayas, la vida de cicloviajero continua y el recorrer las rutas de Himachal Pradesh es un placer, siempre se percibe en la ruta cierta calma que hace que uno quiera quedarse siempre en la pista, y es en el camino hacia el techo de los himalayas que he pasado las ultimas semanas, pedaleando desde Dharamsala hasta Keylong, puerta de las montañas y de los caminos de altura que lamentablemente están cerrados debido a las nevadas que aun continúan en la región: impidiendo mi paso hacia los valles mas recónditos del norte de la india (gracias calentamiento global). mi paso dentro de este estado ha estado lleno de sorpresas y encuentros. una pequena pista alterna hizo de una siesta vespertina una estadía de 6 dais en medio de un poblado de no mas de cien habitantes "Hirni," en donde saboree la hospitalidad de la gente de valle de Kullu, de casa en casa conociendo a todos los pobladores que siempre resultan ser parientes en algún grado, así de casa en casa mi anfitrión me pasea como quien luce con orgullo a la nueva conquista, cada visita tiene un protocolo el cual hay que respetar, iniciando con una buena taza de chai, o te a la menta seguido de las muestras culinarias de la familia, en determinado momento los hombres hacemos una pausa para fumar un cigarrillo local y tomar el famoso alcohol de la región el "vino de arroz" ( es en estos momento que uno quiere tener un buen pisco en el fondo de las alforjas) . bien nutrido y algo alcoholizado me dirijo a la próxima casa, previa caminata por el campo y así la vida pasa día a día , entre caminatas matutinas, vespertinas  entre tazas de chai, y vasos de licor acompañado de las mejores proposiciones de este viaje, como cuando te ofrecen el terreno que me plazca para construir mi casa, o como cuando te insisten para que me case con alguna de  sus mujeres, luego de esto es mas difícil dejar a esta gente que se han ganado un gran lugar en mis ventrículos, pero realmente con pena esta vez decido partir para conquistar las montañas a golpe de pedal. si bien mucha gente me dice que las carreteras están cerradas por la nieve mis ganas de ver hacia donde puedo llegar en dos ruedas me corroen y me pongo en ruta para pasar los pasos mas altos que se pueden hacer en esta temporada,  el ascenso al cielo me toma días, entre viento , sol lluvia y nieve siempre alternadas  por tiempos cortos, pero la alegría de pedalear en las montañas es tan grande y tan fuerte que hacen que el frío y la lluvia se conviertan solo en un condimento de este viaje. luego de pasar una noche refugiado del viento y la nieve en el dormitorio de los cocineros de un restaurante ya que por aquí no se encuentran alojamientos, es que se descubre un nuevo día con sol radiante y 30 cm mas de nieve que el día anterior, describir las sensaciones de pasear por las montañas nevadas de los Himalayas en bicicleta seria un intento vano, solo deseo que el día no acabe y hago los kilómetros mas lentos de este viaje para tomarme el tiempo de contemplar el cielo que se encuentra algo mas cerca.

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